Besos no, por favor.

¿Por qué los adultos se toman muy a pecho los saludos de los niños? Es decir, son niños, realmente no importa si te saludan de lejos o con besito.

Pero parece que a los adultos les encanta recibir un beso. ¿Por qué? ¿Acaso las personas a su alrededor no les dan suficiente amor, que necesitan exigir un beso de un pequeño?…

Eso es lo que me pregunto cada vez que me cruzo con un tío o tía, (de esos que son lejanos y que sólo los ves cuando hay un tono grande) e intentan que mi hija los salude con beso. Mi hija los ha visto una o dos veces en su vida, no tiene porque dar un beso si no quiere. Pero ellos insisten. ¿Por qué?

El significado de la palabra “Saludar” es según la DRAE: ‘Dirigir a alguien, al encontrarlo o despedirse de él, palabras corteses, interesándose por su salud o deseándosela, diciendo adiós, hola, etc.’

Ahora, en qué momento dice “Exigir a un niño a dar un beso porque si no… que va a decir la tía”?

No hay, ¿no?

Probablemente es una tontería, cuando he dicho que no le exijan a mi hija a saludar CON BESO, me dicen “Pero si sólo es un besito” “Pero la niña no va a crecer siendo chuncha o tímida” “Pero hay que ser educada”. Y yo respondo: Señores, mi hija saluda con la mano, la agita y dice ‘Hola’ y eso es todo, ella no es tímida, ella es muy educada. Pero ella no tiene por qué darle besos a alguien sólo porque se le pide hacerlo.

Yo le enseño a mi hija que los besos son una expresión de cariño y sólo los debes dar si te nace hacerlo. Por que otras expresiones de cariño también son los abrazos o las sonrisas y todo debe darse si te nace hacerlo. No porque alguien te pida un abrazo se lo vas a dar. Para que te nazca una expresión de cariño, debes tener confianza con alguien. Y la confianza señores, se gana.

La confianza no es cualquier tío, cualquier tía, el amigo de papá o la señora de la tienda. La confianza va creciendo conforme se van creando lazos, conforme se van compartiendo experiencias y vivencias. La confianza se va ganando con el tiempo. Y eso es lo que yo le enseño a mi hija.

Ahora, un punto aparte.

Hemos leído decenas de casos de violación infantil en este año. Lima es una de las ciudades del mundo más peligrosas para las mujeres y niños. Y todos sabemos que lo más importante es prevenir antes que lamentar. Sé que es un tema muy tenebroso de leer, pero es un tema que debe ser conversado por padres y madres.

1.       ¿Quiénes son las personas de confianza para mi hijo? Deben ser no más de 4 personas, incluidos los padres y personas a las que el niño o niña pueda recurrir en caso ocurra algo malo.

2.       ¿Mi hijo sabe qué partes de su cuerpo nadie debe tocar? Si no sabe, es muy importante que converses con él o ella lo antes posible, comentarle que tiene partes íntimas que no deben ser tocadas por nadie más que él mismo y si en caso, alguien más lo intentara, que lo cuente inmediatamente a sus personas de confianza.

3.       ¿Conozco el comportamiento habitual de mi hijo? Estudios han revelado que después de que un niño ha pasado por una violación o una experiencia traumática, su comportamiento cambia drásticamente, se vuelve más retraído, más callado, su actitud habitual cambia. Por eso es muy importante conocer el comportamiento de tu pequeño, así sabrás si algo ha cambiado en él.

Según estadísticas del 100% de violaciones y tocamientos indebidos a niños y bebés, se ha conocido que el 84% han sido realizados por familiares o personas cercanas al pequeño.

¿Ahora entiendes por qué un beso no es tan simple como parece?

Si bien es cierto, un beso a un familiar es sólo eso. El acto de exigirle a hacer algo que el niño no quiere, va creando una consciencia de sumisión y aceptación.

Por ejemplo:

-        -   Mi hijo es super cariñoso y se la pasa dando abrazos y besos sin que nadie se los pida.

Perfecto por él y eso no es malo. Él tiene formas más físicas de expresar su cariño ó tal vez así se lo han enseñado. Simplemente conversa con él siempre sobre su intimidad, dar abrazos no es malo, pero si alguien sobrepasa esa línea, él debe ser consciente de cuándo se vuelve algo malo.

Pero así como hay niños muy cariñosos y desenvueltos, hay niños que no lo son y eso también está bien. Cada pequeño es un mundo completamente diferente. Si no quiere saludar con besito a la tía o tío, perfecto, simplemente agita la mano y di ‘hola’. Si no quiere ir a jugar con otros niños, pues nada, juega con él, ten por seguro que si tú lo dejas de forzar a hacer ciertas cosas, llegará un momento en que él quiera hacerlo sólo.

Miles de estudios psicológicos prueban de que insistir en que una persona haga algo que no quiere, nunca termina bien. Si tu hijo no quiere comer huevos, pero le das huevos en las mañanas todos los días esperando que se los coma ¿Realmente crees que se lo va a comer sólo porque le insistes? Pero si le dejas de dar por unas semanas, seguro un día te pedirá por sí solo que le des unos huevos.

Es lo mismo en todos los aspectos. Si tu hijo es de los que no dan besos, abrazos o no se desenvuelve fácilmente. Déjale en paz. Explícale las cosas importantes que debe saber sobre su cuerpo. Entiende su posición y dale la oportunidad de tomar la decisión de a quién expresarle su cariño.

Yo sé que vivimos en una sociedad retrógrada y bastante machista. Y probablemente algunas personas piensen que soy muy exagerada por todo lo que he puesto, pero yo vivo con la consciencia tranquila, de que estoy enseñándole a mi hija a respetarse a sí misma y por lo tanto, que nadie puede irrumpir en su cuerpo o su vida, porque si alguien lo hace o intenta hacerlo, está mal.

A veces, el ceder ante la insistencia de un simple beso puede ser una tontería para algunos. Para mi, ceder ante la insistencia de cualquier cosa, es el inicio de una personalidad que no quisiera que mi hija tenga. Quiero que sea fuerte, que sea segura de sí misma y que sepa que lo malo existe y que hay que ser conscientes de ello.

Y esto no debería ser solo para niñas, debería ser para niños también, que tengan poder de decisión, que sepan lo bueno y lo malo y que se comuniquen con confianza. Sólo así podremos prevenir.

Conozco muchas personas adultas que han sufrido tocamientos de niños, estoy segura que tú también conoces varios, y eso no está bien, porque la tasa sigue creciendo. Yo no quiero que mi hija llegue a adulta y diga “A mí también me pasó cuando era niña, pero no dije nada” Yo quiero que ella sepa que lo malo no se oculta, se dice en ese preciso momento.

Ayúdame a prevenir y comunícate con tu hijo.

Confía en él y deja de insistir en que de besos si no quiere hacerlo.

Su comportamiento en un futuro depende de eso.

Sheilla Acosta