Los tatuajes y donar sangre




Los tatuajes, la mayoría de personas nos hacemos tatuajes para plasmar un recuerdo en nuestra piel, no olvidarlo nunca. Un momento, una persona, una acción. Realmente se empieza a volver adictivo una vez que te haces el primero, quieres hacerte el segundo, el tercero y cuando menos te da cuenta, tienes todo el brazo derecho tatuado y debes usar manga larga en el trabajo (ya que aún hay mucha discriminación con las personas con tatuajes).


Pero vamos, justo te pasan la voz, que la tía de una amiga necesita sangre y eres la persona indicada para ir a donarla. Y te entra un miedo grande, pensando si realmente podrás hacerlo porque tienes tatuajes.

Así que te vas al banco de sangre del hospital, te preparas para la discriminación y negación inmediata. Y te das cuenta que tu sangre sirve, porque ya ha pasado año y medio desde tu último tatuaje y no has retocado tus antiguos tatuajes en ese periodo. Así que emocionado, puedes donar sangre a quién lo necesite.



Muchas personas no lo saben; pero a nivel nacional, el periodo mínimo para donar luego de tatuarse es de 1 año. Eso no quiere decir que realmente vas a poder hacerlo, ya que si eres un donante voluntario, depende del banco de sangre que tenga el hospital donde quieres donar. Tal vez ese hospital ya tiene suficiente sangre y negará hacerte exámenes, pero hay muchos hospitales donde podrías donar sin miedo a que te dan una patada en el trasero.

La mayoría de hospitales especializados son los que necesitan más donantes, pero no son los únicos. El Hospital del Niño de San Borja es uno de ellos, así como el Instituto de Enfermedades Neoplásicas, en donde hay muchas personas que están solos y requieren de donantes.



Ahora, no creas que con tu vida de rock and roll también puedas donar sangre solo porque tu último tatuaje fue hace tres años. También piden diferentes requisitos para evitar perder el tiempo con sangre que tal vez no pueda servir. 

Así que antes de ir a donar como voluntario o para ayudar a una persona, te sugiero que veas si tienes algunos de estos hábitos y seas sincero contigo mismo:


-          Fumar
-          Beber alcohol en las últimas semanas
-          Tener varias parejas sexuales en el último año
-          Tener VIH/Sida (bueno, esta es bastante obvia)
-          Tener alguna ETS
-          Haber tenido Hepatitis después de los 12 años
-          Haber consumido drogas (a ver, si haces esto sólo retírate con dignidad, es obvio que no puedes donar)
-          Haber consumido antibióticos  en los últimos días.


Otras cosas que debes saber antes de donar es si estás en este grupo de personas:

-          Embarazadas
-          En periodo de lactancia
-          Personas con diabetes o hipertensión
-          Afectados por problemas cardíacos, renales o neurológicos, como la epilepsia, problemas respiratorios o hematológicos.


Ahora, puede que con todo eso tú digas “Ay, ¿por qué ponen tantas trabas para donar?”


Te voy a decir porque, es para evitar usar sangre dañada, o evitar que te suceda algo luego de donar sangre, así que realmente te cuidan a ti y también a la persona que recibirá tu sangre. No te quejes, pero tampoco suspires de emoción, aún hay algunas cosas más que piden, para saber que eres perfecto o perfecta para la donación:


-          Tener entre 18-55 años
-          Pesar más de 50 kgs.
-          Gozar de buena salud.
-          No haber donado en mínimo 3 meses si eres hombre y 4 meses si eres mujer.
-          Estar dispuesto a realizar el cuestionario donde te preguntan todo lo que está arriba.


Si te acabas de auto-evaluar y piensas que realmente eres la persona indicada para ser un donante voluntario, o ir a ayudar a esa persona que necesita tu tipo de sangre, entonces ¡Ve… corre, no esperes más!


Aguanta, aguanta, espera un rato, ¿Ya tomaste desayuno o almuerzo, sin grasas obviamente? ¿Te has puesto ropa cómoda? ¿Te has aseado correctamente el bracito? ¿Has tomado agüita?


Si es todo correcto, entonces ¡Ve, rápido, no esperes más!


¿Por qué te quedas ahí mirándome?


Oh, ya sé… Te preocupa desmayarte o que te saquen mucha sangre…

No te preocupes, no te vas a morir si has desayunado antes de tu donación, además sólo te sacaran 450cc, que no es mucho cuando en verdad lo piensas.


¿Qué? ¿Qué te puedes contagiar de alguna enfermedad?

¿Estás bromeando, no?, Claro que no, así como con los tatuajes e inyecciones, debes estar atento a que abran la aguja en tu presencia, pero créeme, con los protocolos del hospital, se ganarían una enorme demanda si no lo hacen, así que lo harán.


Vamos, no dudes más, si en verdad sabes que eres una persona que puede donar, entonces hazlo, no sabes la satisfacción que sientes luego de que pudiste ayudar aunque sea un poquito a alguien que necesita tu sangre.


Tal vez no lo pienses mucho, pero en el Perú la tasa de donaciones voluntarias es bastante baja, y hay muchas personas, entre niños y adultos que les gustaría recibir tu ayuda, porque no sólo estás donando sangre, estás donando esperanza, estás donando tal vez un tratamiento más efectivo, un día/año más de vida. Piénsalo por un momento, mastica la idea, siéntete listo o lista para realizarlo.


Ya sé que ya te aburrí con tanta palabrería, lo siento a veces me explayo mucho y no hay quien me pare. Te diré lo último que necesitas saber para ir a donar cuanto antes.


1.       Vas con tu DNI, super campante hasta el banco de sangre del hospital donde quieras donar.

2.       Te harán un cuestionario y lo responderás contento porque vamos, estás haciendo algo grandioso.

3.       Te tomarán una pequeña muestra de sangre para saber el estado de tu hemoglobina entre otras cosillas más.

4.       En algunos hospitales, te toman una muestra un poco más grande y esperas un momento para que te digan si estas apto o no.

5.       En otros, la donación es directa, como me pasó a mí: En el neoplásicas, seguí todos los pasos correctos y luego de ver que mi hemoglobina estaba bien, me llevaron al área de donaciones y durante 10 min extrajeron 450cc de sangre, luego esperé 3 horas para ver mis resultados y me comentaron que estaba todo perfecto y que usarían mi sangresita.

6.       Luego de donar la sangre, debes descansar unos minutos y aprovecha esos minutos de tranquilidad (si eres mamá, sabes de lo que hablo)

7.       Y toma agua una vez que finalices, levántate relajada no más, no te vayas a trotar tampoco, no te pases.

8.       Y eso es todo amigos, si te gustó la experiencia y quieres regresar, cuida tu estilo de vida, deja algunos hábitos como los de más arriba y regresa en 3 ó 4 meses para seguir donando.


Espero que toda esta información te sirva y te convenza que no es nada del otro mundo. Así que levántate y si puedes hacerlo, hazlo. Te sentirás grandioso o grandiosa.


Hasta aquí mi reportaje,

Sheilla Acosta
Wawasumaq

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